Escuchando "Just give a reason" de Pink sentada en el sofá de mis amigos Daniel y Cristina después de una tarde mas de paseo, mucho pensar, cafés infinitos, y de sonrisas he llegado a la conclusión de que esta ciudad cura cualquier tipo de mal. Siempre me había llamado la atención Madrid, y hace diez días dí el "gran paso" para unos y simplemente "paso" para otros, de venirme aquí a vivir. Una nueva y excitante etapa de mi vida acaba de empezar y nadie sabe lo contenta que estoy. Voy a estudiar, a bailar y a trabajar, sí señor.
Hacer cualquier cosa aquí me resulta alucinante; incluso ir al supermercado, sí.
Coger el metro, plantarme en cualquier parte de la ciudad y empezar a andar como si no hubiera mañana, perderme, encontrar rincones realmente especiales y para qué ponerse nervioso por perderse? es mucho mejor buscar una buena cafetería, tomar un café y preguntar. Sí, la gente aquí parece muy amable.
Ponerme mis auriculares, mi música, y tras soltar una carcajada, sentir que estoy en el lugar perfecto y en el momento adecuado.
He conocido a gente increíble y estoy MUY FELIZ.
Echo de menos a mi familia, pero estoy bien y sobretodo, muy contenta.
Bueno, me voy. Es hora de cenar.
YOU ONLY LIVE ONCE.
Buenas noches.
P.
